De nuevo, y como de costumbre, la primera hora de la noche es mi hora de escribir un ratito... Elio está despierto, pataleando como un bichillo con su padre en el sofá, Paula se ha quedado dormida sin decir ni media palabra (El sol, el parque, las carreras... cansan mucho)...

Hoy he dedicado la mañana a las cosas propias del ama de casa y después, he hecho un "saquito" para dar calor en el cuello... ¡me ha quedado estupendo!. Después de recoger a Paula del colegio (Elio está de pellas por que el catarro le ha traido broncoespasmos), hemos ido al pediatra ( mi pequeña princesa tiene gastritis, me ha dado una pena tremenda), luego al parque y a ver a la abuela.

Mañana empiezo "La escuela de Padres", en el colegio de Elio... tengo mucha curiosidad por saber exactamente qué es y para qué sirve, ya os contaré.

Ayer fuimos a una revisión del gastroenterólogo, Elio ha cogido kilo en seis meses y ya mide 91cm (está muy por debajo de su percentil, pero es que él es como su madre: más bien pequeñaja y como su padre: más bien delgaducho). Pero lo mejor vino cuando me preguntó qué come Elio, yo le dije "de todo, pero en puré" y él "pero ¿de todo, todo?" "Si, si hago carne guisada, pues puré de carne guisada y si hago pizza, pues puré de pizza". ¡Los ojos de los estudiantes de prácticas que estaban en la consulta (nada menos que 4) se abrieron como platos!, me miraban y luego miraban al médico como diciendo ¿pero estás oyendo lo que dice esta loca?, hasta que uno se decidió a preguntar " pero... como que puré de pizza, osea, puré de todo, todo?" y yo"si, si, yo hago la pizza o el sandwich o la hamburguesa o lo que sea y lo trituro"... vaya, no sé si los asombrados eran ellos de que Elio coma absolutamente de todo (como cualquier niño de casi cuatro años) o yo de que ellos estuviesen asombrados. Creo que había alguno que no se lo creyó, así que, al final, el médico titular se dirigió a ellos para decirles "es que eso es una alimentación completa"... pero espero que, en el futuro, cuando alguno de ellos coloque una gastroestomía y la madre asustada le pregunte qué le puede dar por "ese agujero", se acuerden de la madre loca que le daba de todo al niño por la sonda y le aconsejen que, con tiempo y calma lo introduzcan todo, es la mejor manera de que el niño requiera menos "aportes y suplementos quimicos" que, si, alimentan... pero no es lo mismo.